El comienzo…
La Universidad de Neuquén
En el año 1965, durante el gobierno de Felipe Sapag, la Legislatura Neuquina a través de la Ley Nº 414, se crea la Universidad del Neuquén.
El propósito de la creación de la Universidad de Neuquén, fue dar una orientación a las escuelas especializadas en la rama del petróleo, minería, industrial y agropecuarios. Estos centros estarían en los lugares más apropiados para la enseñanza. Los estudiantes serían asistidos de tal modo, que ningún problema económico impidiera desarrollar su vocación y actitudes.
El objetivo era evitar la emigración de estudiantes y lograr la radicación de profesores, brindándoles todo para desarrollar capacidades productivas.
El 29 de septiembre de 1964, el poder ejecutivo neuquino elevó a la Legislatura, el proyecto de creación de la casa de altos estudios. El documento proponía la creación en la rama de la ciencia de la educación, las siguientes carreras: Matemática, Física, Química, Historia, Geografía, Castellano y Literatura, y las Ciencias Naturales. También proponía la creación de Antropología Social, Psicología, Administración, Turismo, Geología y Minería.
En 1965, la Municipalidad de la ciudad de Neuquén, donó el terreno para la construcción de la ciudad universitaria. El predio estaba formado por 107 hectáreas, a las que se le anexaron otros terrenos, lo que totalizaron unas 120 hectáreas. Se intensificaron los trabajos de parques y jardines que rodean a los edificios de las distintas dependencias.
El 15 de julio de 1971, el poder ejecutivo nacional sancionó y promulgó, la ley 19.117; por la cuál se crea la Universidad Nacional del Comahue. Se cumplía una de las más sentidas aspiraciones de la comunidad regional era la culminación de un largo proceso que transitó por diversos y laboriosos caminos.
El 15 de marzo de 1972, comenzó el primer ciclo lectivo en el nuevo complejo educativo.
No se trataba de poner en marcha una casa de estudios superiores, siguiendo los lineamientos formales de las que ya funcionaban en el país, sino que se tomaba como base la experiencia de la Universidad Provincial de Neuquen y los Institutos de Río Negro, que ya habían formado varias promociones de egresados.
La historia de la Universidad no ha sido fácil ni ajena a los tiempos que le tocó vivir a nuestra Argentina. Su crecimiento está íntimamente vinculado con el desarrollo de las provincias a las cuales básicamente sirve.
La Universidad está físicamente asentada en dos territorios con historias equivalentes, configurados en una sola unidad humana, social y cultural.