El Pehuensat 1 orbitó 16 años y la Universidad Nacional del Comahue (UNCo) celebró esta semana el exitoso proyecto realizado por la Facultad de Ingeniería que colocó a la universidad en un lugar alto de conocimiento de punta en la Argentina y con el camino abierto para enfrentar el desafío que implica la construcción de nanosatélites
Un equipo de 17 docentes, 44 estudiantes y 3 no docentes liderado por los ingenieros Jorge Lassig y Juan Jorge Quiroga, trabajó en un proyecto que tuvo un tiempo de maduración de diez años, entre la etapa administrativa inicial hasta su lanzamiento el 10 de enero de 2007 desde una base aeroespacial de la India.
Con la presencia de la rectora Beatriz Gentile y la decana de la Facultad de Ingeniería Ana Basset, el miércoles a la tarde, en el Auditorio de la Facultad de Ingeniería, tuvo lugar una exposición a cargo de Lassig, Quiroga y algunos exalumnos que intervinieron en el proyecto, hoy profesionales, sobre la evolución de este proyecto que dejó el conocimiento esencial para desarrollar nuevos emprendimientos tecnológicos de esta características.
La rectora agradeció la invitación a la charla y dijo que es «un orgullo» para la universidad pública y gratuita impulsar estos proyectos que generan grandes desafíos. Alentó a continuar por este camino con nuevas propuestas que van por la senda del «fortalecimiento de la soberanía científica».
Lassig y Quiroga expusieron con detalles y gráficos la evolución del satélite construido con fines educativo y el primero en transmitir con voz en español. Fue lanzado a las 9.23, hora de India (1.53 de la madrugada argentina), a bordo del cohete Pollar Satellite Launch Vehicle (PSLV C7), desde la base de lanzamiento de Satish Dhawan, en la costa este de ese país.
El viaje del Pehuensat 1 duró 20 minutos (viajó a más de 27 mil kilómetros por hora), orbitó a unos 640 kilómetros de altura y tuvo una actividad de seis meses, aunque siguió girando alrededor de la tierra hasta que se desintegró al promediar enero de este año. La vida útil del satélite está marcada por la duración de las baterías y sus sistema de recarga, precisó Lassig.
El satélite pesaba 7 kilogramos, tenía un volumen de 5 litros y la primera transmisión tras su lanzamiento se recibió en Taiwán el 16 de enero de 2007, recordó Lassig en la charla en la que, además, destacó que para la construcción del Pehuensat 1 se aplicó el concepto «aprender haciendo», en alusión a la participación de los alumnos.
Para recibir la información se utilizó la red de radioaficionados y podía transmitir en español, pero también en inglés e hindi.
El conocimiento y la experiencia adquirida con el desarrollo del satélite en materia de resistencia de materiales, diseño, sistemas de comunicación, automatización y recarga de energía, entre otras muchas etapas para la materialización del proyecto, representa para la UNCo un elevado punto de partida para enfrentar nuevos desafíos.