El destino elegido fue San Carlos de Bariloche, un enclave emblemático de la Patagonia que se convirtió en laboratorio vivo para aplicar conocimientos teóricos y metodologías académicas en el análisis territorial.
Metodología en acción: saberes que se conectan con el territorio
Durante este taller, los y las estudiantes participaron activamente en un proceso riguroso de planificación y diagnóstico, aplicando diversas herramientas de investigación:
- Revisión de bibliografía especializada sobre ordenamiento territorial y turismo.
- Análisis de planes de desarrollo turístico locales y provinciales.
- Entrevistas a actores estratégicos del destino.
- Encuestas a residentes y visitantes.
- Observaciones directas en espacios urbanos y naturales.
El resultado fue un diagnóstico preliminar que identifica problemáticas actuales, como la estacionalidad turística, la presión sobre recursos naturales y la informalidad de algunos servicios, junto con oportunidades de intervención estratégica orientadas a la diversificación de la oferta, la participación comunitaria y la valorización del patrimonio.
Diálogo con el territorio: instituciones que enriquecen el aprendizaje
El taller se nutrió del intercambio con múltiples referentes del sector público, privado y académico, quienes compartieron miradas valiosas y datos clave para el análisis:
- Bruno Hellriegel – Dirección de Política Turística Regional – Zona Oeste
- Sergio Herrero – Secretaría de Turismo de Bariloche
- María Teresa Brosz – Parque Nacional Nahuel Huapi (Uso Público)
- Lic. Cecilia Candelari – EMPROTUR
- Orieta Lillo Arenas – Asociación Hotelera Gastronómica
- Néstor Denoya – Asociación de Turismo Estudiantil
- Cámara de Turismo de Bariloche – ATEBA
- Sebastián Di Nardo – Universidad Nacional de Río Negro (UNRN)
Estas colaboraciones consolidaron una red pedagógica territorial que fortalece la formación profesional con enfoque local, crítico y comprometido.
Docentes guías: acompañamiento y reflexión
La experiencia fue coordinada por un equipo docente que promovió la articulación entre teoría y práctica, fomentando la lectura crítica del destino y el respeto por sus complejidades: Natalia Marenzana, Martín Herrero, Carolina Molins, María Gabriela Dupén y Luis Canepa orientaron cada fase del trabajo con claridad metodológica y vocación formativa.
Una práctica que transforma: educación situada y compromiso real
Más que un viaje, lo vivido en Bariloche fue una instancia de transformación: un modo de aprender conectando con realidades concretas, escuchando voces locales, y proyectando escenarios futuros para un turismo más justo, sustentable y consciente. La Universidad Nacional del Comahue demuestra, una vez más, que educar en turismo es formar agentes activos de desarrollo con sensibilidad territorial y ética profesional.